Copa en Flamas
Copa en Flamas
Deja que llene copas con miel de tus delicias
¡Que levante la espuma de tu encanto de vida!
Que se ahoguen recuerdos de pasadas caricias
que se embriaguen nocturnos con ansia desmedida
Deja que la noche hable del dulzor de tus besos
y me abrigue en tu pecho cual reina consentida
¡Deja que el vino en copa me ahogue en sus excesos!
Y mi piel la desnude, danzando embrutecida
Deja que yo imagine ¡Que rasgo tus esencias!
Que el reloj de las horas abra el puño vencido
Y demuestre que soy… ¡Mujer de turbulencias!
Que soy, duende de sombras en tu miedo aterido
¡Relámpago en tu noche bruna de penitencias!
¡Un rosedal con púas sangrándote el sentido!
Beatriz Vicentelo
Definitivamente, tu poema es como un dardo, un trozo de brasa transformado en rimas, porque le das emotividad a tus palabras, palabras que parecen desnudas para expresar tus ansias, tus sensaciones como un estremecimiento o una promesa alada.
ResponderBorrarAl escribir o describir las voces de tu sentimiento parece tu poema un grito, un atropello de pasiones vivas con los calores tibios de los nidos.
Y es que al escribir no te conformas con expresiones planas, buscas algo más que la palabra dicha, algo que en verdad refleje los anhelos, las profundidades inquietas de tu alma… y lo logras bien.
Ernesto C.