La Gran Alfonsina

La Gran Alfonsina 


Suiza surge fortuita con su lámpara en mano

muestra escollada ruta, cristal reverberante

Argentina se ofrece con pasión adoptante

en cascadas de plata su semblante lozano


El amor como duende transformándose enano

en rueda de aquelarre, finge ser buen amante

esperanza de hielo trae estrella agobiante

desilusión suicida le sustenta el desgano


Ya el páramo tullido se oxida en frío puerto

¡Su crujido es un llanto que invita al sueño yerto!

Y cuando hiedra encona,  vapulea glicina


por la espuma de playa que la cresta estremece

Mas, la gaviota  eterna con el ala remece…

¡Glorias para la pluma de la gran Alfonsina! 


Beatriz Vicentelo



 

Comentarios

  1. Un bello homenaje a la desdichada Alfonsina, que parecida a otros escritores como Stefan Zweig, Leopoldo Lugones y Horacio Quiroga, acudió al suicidio para acortar las penas.
    Y es triste cuando se leen sus poemas imaginar su tragedia, su solitario fin, la de un ser con un sentimiento alado que solo supo tener dulzuras en el alma
    Te felicito por este recordatorio a modo de poema, por no olvidar a un ser que parecía escribir con el corazón en la mano
    Su muerte entre las olas ha sido inspiración de canciones y muchos poemas, y el tuyo lo destaco, porque es conmovedor, hermoso y toca dentro
    De nuevo mis felicitaciones.

    Ernesto C.

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