Retirada
Retirada
El reloj marca la hora del retiro
y el café de apatía humea en mesa
por el rincón oscuro se confiesa
el moribundo beso en un suspiro
Desayuno de miel, dio amargo giro
ya el tazón del azúcar no interesa
ni para encomendar otra remesa
el presupuesto muestra sobregiro
Lecho de indiferencia ya rechina
se oxidó por acopio de la herrumbre
y las ofensas cuelgan por la esquina
con la estufa de amor sin gas ni
lumbre
la luz de la pasión encalabrina
todo se terminó, por la costumbre
Beatriz Vicentelo
Leo en este poema la historia de un amor agónico, de un sentimiento vestido de luto por algo que murió y no tiene resurrección, y no solo leo, admiro este poema por su manera de ser escrito, jugando con el ritual del desayuno, de ese instante mañanero para desarrollar un excelente tema.
ResponderBorrarNo todos saben de un suceso cotidiano, sacar un narro hecho poesía, no todos alcanzan ese nivel que has logrado en tus sonetos, eso es concentración y mucha dedicación, cosa esta que es menester de los grandes, de los que aman en verdad el arte de la poesía.
Me ha gustado mucho este soneto.
Ernesto C.
Miles de gracias compañero de letras!
ResponderBorrarMe encantó tu comentario
Era lo que esperaba
Cariños