María Antonieta....
María Antonieta
La desdichada aurora se extendía cetrina
con modulado paso, entre gritos de Francia
no hay rosas en Versalles ni aromas ni
elegancia
solo una alfombra negra rumbo a la guillotina
La pulla en carcajadas en grotesca cortina
envuelve maldiciones con polvos de abundancia
la carreta de trono, minada de prestancia
emprende traqueteos hacia una suerte endrina
Pálida abucheada, con las manos atadas
¡María Antonieta reina cual cuento de hadas!
Fue acusada al final, de
"sanguijuela" pública
Y arrogante en su porte, sometida al verdugo
sin lágrimas, sin ruegos ¡Valiente ante su yugo!
Rodó su testa al grito de..., ¡Viva la
República!
Beatriz Vicentelo
Dos elementos veo, un hermoso poema y una triste historia, la de la reina María Antonieta, llamada la austriaca por el pueblo que nunca en verdad supo aceptarla, en su biografía Stefan Zweig le hace un retrato comprensivo, aunque su indolencia, su falta de conocimiento del pueblo la hizo ignorante de la tragedia, de la miseria que se vivía en Francia, hay una anécdota donde alguien le dice que el pueblo no tienen pan, y ella como nunca tuvo necesidades le dice, si no tienen pan que coman pasteles.
ResponderBorrarSin embargo en su desgracia, luego de la muerte de su esposo Luis XVl, se mantuvo firme ante la plebe que le lanzaba piedras camino a la guillotina, y supo morir con dignidad en medio de las ofensas de la chusma.
Hermoso poema, bien detallado y con imágenes elegantemente trabajadas, precisas para que destaquen y le den brillo a tu soneto, a un soneto muy de mi gusto.
Seguimos con la historia.
Ernesto C.