No pido mucho...
No pido mucho, solo el modo exacto
de hacer mi vida como yo la quiero
tranquilamente sin perder el tacto
para esto grato de sentirme entero.
Siguiendo el ritmo de lo que me llena
Y da a mi convicción la contextura
la bella forma de una acción serena
que trota cada noche una aventura.
Que es una forma de tomar a un libro
que me abre puertas a otro mundo claro
a otros motivos en que bien calibro
aquello a solas donde busco amparo.
No pido mucho, me conforma el hecho
de atar mi convicción a mi deseo
a lo que nunca importará lo estrecho
del rumbo si conduce a lo que creo.
Porque no tengo que pedir permiso
para soltar al aire mis empeños
para seguir un paso que preciso
conoce los caminos de mis sueños.
No pido mucho, más o menos eso
que sabe de sonrisas sin censuras
que me da el gozo de inventar un beso
y el arte de existir sin ataduras.
Ernesto Cárdenas…
Porque no tengo que pedir permiso
ResponderBorrarpara soltar al aire mis empeños
para seguir un paso que preciso
conoce los caminos de mis sueños.
Hermosas letras, escritas con gran sabiduría. Cada cual tiene su vida y la maneja a su gusto. No somos ya niños para requerir guía o permiso. Con los años buscamos al final, nuestro acomodo, ya que vamos soltando responsabilidades que son las que muchas veces, nos atan a comportarnos de tal manera.
Grandioso poema que me ha encantado leer!
Miles de gracias mi querido Ernesto!