Despecho

 

Despecho

 

Yo conocí solo un lado

de un limpio río y ribera

y sus coloridas flores

y el pinar cuando se eleva

y la borrasca del cauce

y el laberinto de piedras

 lado amoroso de un rio

el lado de blanca arena

Y llegaste en tu canoa

con tus frases lisonjeras

me mostraste el otro lado

ese lado de tristezas

donde nos arremolinan

culpas, dejándonos ciegas

donde los celos te cortan

sangrando el hervor de venas

Y crucé lo prohibido

creída de tus promesas

y llegué a ti ilusionada

con mis absurdas proezas

E imaginé un gran castillo

alzado entre tus dehesas

¡Fuiste y eres todavía!

Ese cisne que azulea

las neblinas del pasado

en lagunas que verdean

¡Qué cursi habré parecido!

Escribiéndote poemas

¡Ay yo creí tantas cosas!

Me adherí a tu enredadera

con jazmines y alhelíes

con aromas que marean

¡Y te adoré con el alma!

¡Y te amé como quisiera!

El señor del mejor mundo

¡El semidiós de mi iglesia!

Pero tú, jamás me amaste

fui tu cuita pasajera

juego de entretenimiento

¡En divertida ruleta!

Cuánto siento hoy, haber

amado de esa manera

cuando tú no me quisiste

¡Ni tan poquito siquiera!

¡Si, tus besos… ah tus labios!

Tus labios tenían lepra

que carcomieron mis carnes

mi espíritu y el alma entera

¿Contento?  Muy bien, mi abrazo

felicitaciones  ¡Sean!

¡Ufánate de tu triunfo!

¡De tu conquista y bandera!

Mas si, agradeceré

te olvides de esta tu hembra

y no… ¡No me busques nunca!

Ni curiosees laderas

ni por ganas ni disculpas

así  conciencia te muerda

así el infierno se hunda

y se vuelen sus trincheras

¡No me indagues no interrogues!

¡Así mi madre fallezca!

Solo, solo avisa cuando 

riesgo eminente te acecha

para yo venir corriendo 

y ¡Ayudar a que te mueras!


Beatriz Vicentelo

 

 

Comentarios

  1. Un final duro, pero creo bien merecido si no supo estar a la altura de tus sentimientos, porque es triste darlo todo y solo recibir migajas, cuando el amor bonito es recíproco y es un caramelo para dos.
    Largo tu poema, pero hecho con el sentimiento volcado hacia afuera, con el corazón sangrando en la mano.
    Tus poemas en verdad parecen dolores punzantes lanzados sobre el papel, son reflejos internos de alguien que parece que ha sufrido, que lleva las cicatrices de golpes antiguos en el alma. Eso es lo que comunican, lo que transmites, lo que entiende el que te lea y te comprenda.

    Ernesto C.

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  2. Cierto, el final es fuerte, aparte que a nadie se le desea la muerte, pero es poema y en poema somos hasta criminales; por ese final, este poema jamás fue publicado.
    Muchas gracias amigo!

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